Ni las estrategias, ni los esfuerzos interinstitucionales, ni las cuantiosas inversiones para modernizar y equipar la Policía Nacional han logrado controlar la delincuencia y el crimen violento que sigue causando intranquilidad y zozobra en todo el país.Y como extraña paradoja de la sociedad dominicana, los propios agentes policiales y militares, encargados de proteger la vida y la seguridad ciudadana, han estado involucrados de manera directa en un elevado número de hechos violentos que han conturbado el ánimo de la población.
Desde el pasado 16 de agosto, cuando fue posesionado el nuevo jefe de la Policía, mayor general José A. Polanco Gómez, en el país se han producido unas de 120 muertes violentas, según estadísticas la Dirección Nacional de Patología Forense y la propia policía, entre los que se cuentan 16 agentes policiales y militares.
De 104 homicidios de civiles que se han registrado en apenas dos meses y medio, los miembros de la Policía y las Fuerzas Armadas han estado involucrados en más de un 40 por ciento de estos casos o han sido responsables de manera directa de las muertes.
Este involucramiento de las fuerzas del orden y la seguridad nacional en violencia delictiva va desde homicidios en alegadas “acciones legales” (durante horas de servicio) hasta tráfico de drogas, asaltos, robos, extorsión y feminicidios.
La implicación de tantos policías y militares en hechos de sangre y en delitos causa una gran preocupación social y en las esferas del gobierno, dijo recientemente el ministro de Interior y Policía, Franklin Almeyda Rancier. “La Policía ha disparado la tasa de criminalidad en 3.4% debido a la incapacidad en el manejo de las técnicas policiales”, dijo Almeyda, señalando que el Gobierno hace esfuerzos para dotar de equipos y capacitar a los miembros de la institución policial.
Hechos grotescos
Entre los hechos sangrientos más relevantes en que se han visto envueltos policías y militares en los últimos dos meses están la muerte de tres agentes policiales en el sector Los Girasoles por un grupo de alegados delincuentes, entre los que se encontraba un miembro de la Marina de Guerra.
Como consecuencia de estos hechos, la Policía mató a balazos a tres hombres en Los Alcarrizos, entre los que se encontraba uno de los fugitivos por la muertes de los agentes, y luego fueron muertos otros dos.
En Herrera, un saldo sangriento de cuatro muertos y tres heridos, entre ellos el teniente policial Fidel de León, aumentó las cifras de agentes involucrados en violencia. Tres de las víctimas eran presuntos delincuentes y entre los asaltantes también había un sargento de la Marina de Guerra.
En septiembre, las muertes de Marcos Douglas Figueroa Ferreira y Vladimir Paulino Consuegra, quienes fueron decapitados en una zona rural de San Cristóbal por un supuesto tumbe de drogas, involucraron nuevamente a la uniformada, en este caso a dos oficiales de Policía.
Ese mismo mes fue muerto por delincuentes en Herrera el teniente Fidel de León Torres, mientras que días antes murió de dos balazos Fausto Mercedes Soto. Otras víctimas de la misma semana fueron Francisco Santos y Antonio Ramírez. El dos de septiembre murió Manuel González a manos de la Policía.
El fin de semana que siguió al 24 de septiembre fue el más sangriento: 11 personas cayeron en enfrentamientos con la Policía.
Dos presuntos asaltantes murieron y varios resultaron heridos durante un enfrentamiento a tiros con agentes policiales en la comunidad Los Quemados, Santiago Rodríguez. Entre los heridos fue identificado un ex cabo de la Marina de Guerra, que se hacía pasar por policía.
Hace apenas unos días que dos supuestos asaltantes mataron a un sargento mayor de la Policía en el kilómetro 18 de la autopista Las Américas, luego la policía mató a uno de los agresores.
Más casos
Según estadísticas de la Policía unos 52 agentes han muertos desde enero hasta la fecha y 107 han sido heridos. Doce fueron muertos mientras se encontraban en servicio, ocho en atracos, seis en riña, uno pasional, tres con acciones delictivas, once para despojarlos de sus armas, uno para quitarle su motocicleta y siete en circunstancias desconocidas.
(+)
LOS HOMICIDIOS MÁS RECIENTES
Entre los policías caídos hay dos asimilados, 14 cabos, nueve sargentos, cuatro rasos, siete sargentos mayores, ocho segundo tenientes, tres con el rango de primer teniente, un capitán y un mayor.
El día ocho de este mes murió a puñaladas Reudy Cuello Báez, de 45, tras sostener una riña por alegados problemas personales con Flavio Nelson Cuevas Rodríguez, de 43 años, en Los Mina y Mary Soto fue muerta de un disparo por su concubino. Rosa Comprés murió de una pedrada que le hizo otra mujer.
Entre los muertos en las últimas semanas están Santo Moreno García (Júnior), Baulio alias Popollo, Nicolás Arredondo Fabián y Marcos Benito Santana. El menor José Luis Castillo Fermín, Marcelino Antonio Quezada, Dionicia Luduvina Jiménez de Sosa, Darlin Peña Cruz y Rafael Oscar Valerio.
LISTIN DIARIO
Desde el pasado 16 de agosto, cuando fue posesionado el nuevo jefe de la Policía, mayor general José A. Polanco Gómez, en el país se han producido unas de 120 muertes violentas, según estadísticas la Dirección Nacional de Patología Forense y la propia policía, entre los que se cuentan 16 agentes policiales y militares.
De 104 homicidios de civiles que se han registrado en apenas dos meses y medio, los miembros de la Policía y las Fuerzas Armadas han estado involucrados en más de un 40 por ciento de estos casos o han sido responsables de manera directa de las muertes.
Este involucramiento de las fuerzas del orden y la seguridad nacional en violencia delictiva va desde homicidios en alegadas “acciones legales” (durante horas de servicio) hasta tráfico de drogas, asaltos, robos, extorsión y feminicidios.
La implicación de tantos policías y militares en hechos de sangre y en delitos causa una gran preocupación social y en las esferas del gobierno, dijo recientemente el ministro de Interior y Policía, Franklin Almeyda Rancier. “La Policía ha disparado la tasa de criminalidad en 3.4% debido a la incapacidad en el manejo de las técnicas policiales”, dijo Almeyda, señalando que el Gobierno hace esfuerzos para dotar de equipos y capacitar a los miembros de la institución policial.
Hechos grotescos
Entre los hechos sangrientos más relevantes en que se han visto envueltos policías y militares en los últimos dos meses están la muerte de tres agentes policiales en el sector Los Girasoles por un grupo de alegados delincuentes, entre los que se encontraba un miembro de la Marina de Guerra.
Como consecuencia de estos hechos, la Policía mató a balazos a tres hombres en Los Alcarrizos, entre los que se encontraba uno de los fugitivos por la muertes de los agentes, y luego fueron muertos otros dos.
En Herrera, un saldo sangriento de cuatro muertos y tres heridos, entre ellos el teniente policial Fidel de León, aumentó las cifras de agentes involucrados en violencia. Tres de las víctimas eran presuntos delincuentes y entre los asaltantes también había un sargento de la Marina de Guerra.
En septiembre, las muertes de Marcos Douglas Figueroa Ferreira y Vladimir Paulino Consuegra, quienes fueron decapitados en una zona rural de San Cristóbal por un supuesto tumbe de drogas, involucraron nuevamente a la uniformada, en este caso a dos oficiales de Policía.
Ese mismo mes fue muerto por delincuentes en Herrera el teniente Fidel de León Torres, mientras que días antes murió de dos balazos Fausto Mercedes Soto. Otras víctimas de la misma semana fueron Francisco Santos y Antonio Ramírez. El dos de septiembre murió Manuel González a manos de la Policía.
El fin de semana que siguió al 24 de septiembre fue el más sangriento: 11 personas cayeron en enfrentamientos con la Policía.
Dos presuntos asaltantes murieron y varios resultaron heridos durante un enfrentamiento a tiros con agentes policiales en la comunidad Los Quemados, Santiago Rodríguez. Entre los heridos fue identificado un ex cabo de la Marina de Guerra, que se hacía pasar por policía.
Hace apenas unos días que dos supuestos asaltantes mataron a un sargento mayor de la Policía en el kilómetro 18 de la autopista Las Américas, luego la policía mató a uno de los agresores.
Más casos
Según estadísticas de la Policía unos 52 agentes han muertos desde enero hasta la fecha y 107 han sido heridos. Doce fueron muertos mientras se encontraban en servicio, ocho en atracos, seis en riña, uno pasional, tres con acciones delictivas, once para despojarlos de sus armas, uno para quitarle su motocicleta y siete en circunstancias desconocidas.
(+)
LOS HOMICIDIOS MÁS RECIENTES
Entre los policías caídos hay dos asimilados, 14 cabos, nueve sargentos, cuatro rasos, siete sargentos mayores, ocho segundo tenientes, tres con el rango de primer teniente, un capitán y un mayor.
El día ocho de este mes murió a puñaladas Reudy Cuello Báez, de 45, tras sostener una riña por alegados problemas personales con Flavio Nelson Cuevas Rodríguez, de 43 años, en Los Mina y Mary Soto fue muerta de un disparo por su concubino. Rosa Comprés murió de una pedrada que le hizo otra mujer.
Entre los muertos en las últimas semanas están Santo Moreno García (Júnior), Baulio alias Popollo, Nicolás Arredondo Fabián y Marcos Benito Santana. El menor José Luis Castillo Fermín, Marcelino Antonio Quezada, Dionicia Luduvina Jiménez de Sosa, Darlin Peña Cruz y Rafael Oscar Valerio.
LISTIN DIARIO
No hay comentarios.:
Publicar un comentario